Fellowes alerta a las PYMEs sobre el peligro que representa el robo de identidades para su negocio

Dos informes presentados por la compañía, realizados en el 2006 en PYMES del Reino Unido, ponen de manifiesto un desfase importante entre percepciones y hechos, en cuanto a gestión y destrucción de información confidencial se refiere.

- Si bien un 93% de las PYMEs consultadas en el primer estudio afirma tomarse muy en serio el asunto del robo de identidades,en el segundo, un 79% de los negocios analizados no ha adoptado ninguna medida dirigida a destruir el material sensible.


Madrid, a 4 de Diciembre de 2006.- Fellowes Ibérica, filial en España del principal fabricante mundial de destructoras de documentos en formato papel y CD, advierte sobre los riesgos que representa la inadecuada gestión y destrucción de información confidencial en las PYMEs.

Se puede decir que, en general, las empresas están fallando a la hora de establecer medidas que les protejan a sí mismos y a sus clientes del robo de identidades. Esa es la principal conclusión que se extrae del estudio llevado a cabo en el Reino Unido y dado a conocer por Fellowes, con motivo de la celebración de la National Identity Fraud Prevention Week 2006, un evento sin precedentes celebrado en este país y dirigido a concienciar a la sociedad sobre este grave problema.

- Si bien en España todavía no se han llevado a cabo este tipo de estudios, explica Héctor Barak, Director General de Fellowes Ibérica, aquí nos encontramos con una problemática muy similar, por lo que una labor de concienciación resulta totalmente imprescindible para reducir el riesgo.

Las PYMEs - en el punto de mira

Dos estudios, encargados por Fellowes en el Reino Unido, han resultado muy esclarecedores sobre la evolución de esta problemática. En el primero de ellos, encargado a la consultora Populus y llevado a cabo a través de una encuesta telefónica con directivos de pequeñas y medianas empresas, muestra que el 93% de estas empresas en el Reino Unido asegura tomarse muy en serio el asunto del robo de identidades y su prevención, de ahí que el 91% afirme recurrir a la destrucción de aquellos documentos que contengan información personal o sensible (como direcciones postales, detalles de cuentas bancarias o números de tarjetas de crédito), antes de deshacerse de ellos. Aproximadamente el 89% de las PYMEs consultadas declaran tener unas claras directrices sobre como tratar información confidencial tanto de los clientes como de otros empleados, mientras que el 88% afirman haber facilitado a su personal unas guías explicando cómo deben deshacerse de diferentes tipos de documentos.


Desfase entre intención y acciones

Otro estudio de búsqueda en las papeleras, encargado por Fellowes a WastesWork y cuyo objeto también fueron PYMEs de diversos sectores, puso de manifiesto comportamientos muy opuestos. El informe, que consiste en identificar la información que los negocios tiran a las papeleras y que podría ser utilizada para cometer un fraude empresarial o de identidad, reveló por ejemplo que el 79% de los negocios de la muestra no han adoptado ninguna medida dirigida a destruir material sensible antes de que vaya a ser deshechado o preparado para su reciclado.

Por otra parte, el 30% de las compañías de la muestra confiesan haber tirado de información que podría ser útil a sus competidores, mientras que el 40% tiraron información confidencial de sus clientes, incluyendo sus direcciones, números de teléfono y fotocopias de su documentación. El 30% también se deshizo de información personal acerca de sus empleados, tanto detalles personales como laborales, así como sus datos bancarios.

Las destructoras de documentos: una prevención eficaz

No se puede robar lo que no se puede leer, por ello, se ha repetido que la mejor manera para prevenir el robo de la identidad es el de deshacerse de la información personal y empresarial sensible de tal manera que la misma no pueda caer en manos inadecuadas. Los expertos coinciden que la forma más adecuada para eliminar los datos que ya no se necesitan es destruirlos, utilizando preferiblemente destructoras con un corte que haga más difícil el restablecimiento del documento.

Para dar respuesta a las necesidades del entorno profesional, Fellowes posee una amplia variedad de destructoras de documentos, basadas en las necesidades de los usuarios y con capacidad para destruir hasta 40 hojas de una sola vez y más de 10.000 hojas al día, convirtiendo el papel en finas partículas, así como CDs, tarjetas de crédito, etc.

Los modelos PS-70, PS-77Cs, SB-80, SB-87Cs, SB-97Cs y MS460 componen la gama de equipos englobados en el segmento de la PYME, para ser utilizados entre uno y cinco usuarios. Además de las características citadas en los modelos anteriores, disponen de capacidad para deshacerse de entre 15 y 18 hojas al mismo tiempo, destacando también su capacidad para destruir CDs.

Para unas necesidades más avanzadas, destaca la Gama 100, formada por los modelos C-120 y C-120C que se distinguen por la forma del corte, y por las máquinas C-220 y C-220C, la primera de las cuales está preparada para destruir CDs. En la Gama 300 figuran, los modelos C-320, 320-C, C-380 y C-380C, todos ellos con capacidad para destruir CDs y ser usados por más de 10 personas. Por último, la Gama 400 es la más evolucionada de todas. Diseñada para más de 20 usuarios, incluye los modelos C-420 y C-420C, por un lado y C-480 y C-480C.


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