La tecnología, vía para el crecimiento y la competitividad

La tecnología supone una importante vía para el crecimiento y la competitividad de las empresas. Sectores industriales como suministro industrial o ferretería empiezan a contar con las Nuevas Tecnologías como aliadas, como pone de relieve la extensión de la conectividad inteligente de datos en estos sectores.

En los últimos cinco años, las empresas han empezado a modernizarse con herramientas que les permitan una mayor difusión del negocio, un mejor control y una optimización de las existencias. Y en respuesta a esto, las aplicaciones informáticas han sufrido una importante transformación. Han pasado de ser aplicaciones que gestionaban independientemente la contabilidad, la facturación, el almacén o la fabricación, a desarrollar aplicaciones que cubrieran todas las áreas de la empresa (ERP). Este cambio ha permitido una gestión interna mucho más efectiva, y el acceso al mismo dato de formas diferentes. En definitiva, han solucionado, por así decirlo, la interconexión de las aplicaciones dentro de una empresa.

En la actualidad, la inmensa mayoría de las compañías disponen ya de una aplicación informática que oscila desde el sencillo SP, hasta ERP’s que permiten la gestión total del negocio. La gran distribución y las medianas empresas suelen utilizar también estas últimas para el control de stock, referenciación de los artículos con los que trabajan, actualización de precios de compra y precios de venta, etc., mientas que en el caso de las pymes, de momento, utilizan el programa de gestión sólo para la facturación y la contabilidad. La tendencia sin embargo, camina hacia una modernización total y prueba de ello son las ferreterías con gestión de almacén que han pasado a representar del 5% al 30% en la actualidad.

También se viene produciendo una automatización de los procesos de gestión de almacén por radiofrecuencia, aproximadamente en el 5% del sector, así como la automatización y robotización de los almacenes de la distribución. Por el momento, sólo las cooperativas y los grandes almacenes han comenzado con este proceso.

Aún con todos estos avances, aún queda mucho camino por recorrer, porque las empresas dependen tanto de sus proveedores como de sus clientes para acortar la cadena de suministro de un producto. Dependencias éstas que generan una importante carga administrativa difícil de optimizar y que suponen siempre un freno para el crecimiento de la empresa. “Para poder ser más competitivos, dedicarnos a la búsqueda de nuevos mercados o mejorar la atención al cliente es imprescindible que esta carga vaya necesariamente a menos”, señaló José Antonio Martínez, presidente de TLR.

Agilizar el cierre del ciclo operacional y optimizar los procesos de gestión de manera integral tiene que pasar ineludiblemente por la conectividad de datos de las aplicaciones informáticas con las de los clientes y proveedores. TLR es la única empresa que aporta esta conectividad de forma integral, automatizando el intercambio de documentos como pedidos o facturas, o con la actualización simultánea de tarifas o visionado de catálogo directamente en el programa del usuario. Numerosas empresas del mercado ya se están beneficiando de esta tecnología inteligente, al comprender que resulta su aliada para el crecimiento y productividad, en un mundo cada vez más competitivo.